Aznaritis...

Observad que resaca ha dejado Aznar, después de sus ilógicas palabras. Esperemos que no haya contagiados, de este virus que escupe y escampa, el de superhombre, esta enfermedad con síntomas parecidos a los que da, el traje nuevo de Spiderman, ese de color negro que le da más valentía, más desvergüenza, lo hace más insolente, creído e incluso juzgarse mejor y más gracioso. Por ejemplo, imaginad que se contagiara el sr. Fidalgo de CC.OO. y el pasado 1 de mayo, en vez de pedir un aumento del SMI, se pusiera a vacilar, de cómo a los albañiles les obligan a llevar casco, o como los camioneros tienen que dormir sus 9 o 10 horitas, o como es posible que a los médicos, se les obligue a ser higiénicamente correctos y no solo a los médicos. Afirmando con rotundidad que quién son ellos para obligarle a nada (aunque sea por su seguridad y para la de los demás). ¿Que diría la opinión pública de el sr. Fidalgo? Esperemos que Aznar, como hace ya en la intimidad con el catalán, y ahora que esta aprendiendo inglés, lo ponga en practica, hablándolo en sus intervenciones públicas, aunque sea en nuestro país, porqué así por lo menos no sabremos a que nos invita una vez más y mucho menos lo sabrán, los anglo-parlantes. No fuera el caso que nos contagiara una Aznaritis.