miércoles, 16 de abril de 2008

Amor soñado.

Bésame despacio que la noche es corta. Que de esta luna nos echará el sol, al entrar por la ventana, como un despertador, cruel por despertarme y separarnos. Ven a rescatarme vestido con nada, con tu suave piel, con el calor de tu cuerpo, que mañana seré vieja. Entra en la cama que sin ti es fría y ancha como decía la canción. Bésame despacio para poder saborear tu dulce amor, guardándolo para el recuerdo. Tu olor se pega a las sabanas, les da el aroma que tanto añoro, vuélveme a besar y por favor, que sea despacio. No dejes de sonreír durante toda la noche, como lo hiciste la primera vez que de novios, hicimos un poema con tu cuerpo y el mío, en la habitación 52 de este bonito hotel. Háblame al oído, como quien canta una balada, para saber que aún soy tu amada. Que el amor se apodere de las horas, como si fuera el va i viene de las olas. Se mi faro en esta oscuridad, para hacerme olvidar mi soledad. Y bésame, bésame despacio. Que mañana al dejar de soñar solo serás nostalgia y melancolía, de esta triste anciana que vuelve a este hotel y a esta habitación, para recordar. Y mientras, esperaré con timidez volver contigo a la intimidad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

és preciós.
una abraçada.
nena*

Anónimo dijo...

Com sempre un final sorprenent!Molt sovint, en els teus escrits, a mesura que vaig llegint, vaig pensant: per a on anirà, a on em portarà?És curiós la sensació que em produeixen.Una fan teva vaja!Omaaaa