jueves, 24 de julio de 2008

Camino errante.

Ha sido sin querer, pero los nervios han vencido mi tenacidad.
El frío entraba por debajo de la ventana, por el techo, por la puerta. Era casi tan intenso como el de fuera. Dos mantas nos echábamos al acostarnos, pero ni así lograbas sacárnoslo de los huesos. Mis hermanos como yo, tiritaban en silencio durante buena parte de la noche, hasta que mi padre llegaba una vez más a altas horas, después de trabajar. Recuerdo escucharlos reñir un día si otro también, con mi madre gritando como una gata celosa. Seguidamente mi padre nervioso, como yo hoy, entraba en la habitación y al descubrir que no dormíamos nos pegaba. No sé si el sentir dolor de que sus propios hijos pasaban frío, para no matar a mi madre o el no dejar de trabajar durante largas jornadas y no poder salir de ese lodo pegajoso que es la pobreza, llevaban a mi padre a cometer esa injusticia. Que luego intentaba remediar con llanto, y besos hacía nosotros. Y mi madre seguía allí chillando. Ahora, mayor, creo que no la mato porqué creía que el solo no nos hubiera podido dar tan solo ni de comer. Al cumplir 15 años mi hermano mayor se fue. Y no se llevo ni el frío y ni las noches eternas y crueles. Yo seguí en casa como alma apenada, creciendo de tamaño pero no como persona. Seguía la senda errante que había llevado mi padre. Hasta que con veinte años me casé y forme una familia donde el frío, he intentado dejarlo fuera sin conseguirlo. Me juré con 12 años no pegar nunca a mis hijos, hoy les he dado una paliza a los tres. Mi mujer ya no grita, ellos tampoco lloran ya. Solo me queda pegarme el tiro este que tanto anhelo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Este escrito... me llena de tristeza... Ahora comprendo que es un reto salir del pasado... pero es un reto aun mas grande no dejar que regrese a hacer de las suyas en nuestro presente...

Se que es difícil... pero es lo único que podemos hacer por los que ahora están en nuestras vidas....

Se que es complicado... pero no permitas que los amas recorran el mismo camino que tu...

Animo... Reconocer los errores es el primer paso para no volver a cometerlos....

Abrazos

Anónimo dijo...

http://maranloz2.blogspot.com/

Este es mi otro blog.... cuando puedas visitarlo...será un placer recibirte por allá