Lucharon con y contra todo durante un largo periodo para poder conseguir procrear. Ahora, el niño, tiene doce meses. A ellos, según me han contado, se les ha acabado el amor. Cómo cuando estás en un restaurante, y se acaba el pan y, pides al camarero, que por favor, traiga más para poder terminar la comida, pero ellos, están faltos camarero y de pan. No hay quién reponga el cántaro del amor. Ya conté, que para mí el ron sería un buen símil del amor. (http://escritosdedebito.blogspot.com/search?q=ron+zacapa)
Creo estar seguro, que el efecto del enamoramiento no dura más de tres o cuatro meses. En mí al menos es así. Después ya es algo cursi y presuntuoso y, si no tienes cuidado, algo egoísta para la individualidad de la pareja. Lo que queda, es el querer. Cómo sino, le diría a mí mujer, la noche antes de nuestra boda, que yo no estaba enamorado de ella. Que la quería, y mucho, pero esa era la realidad. Llevábamos ya, entonces, bastante más de cuatro meses, como podéis suponer. Si no, no me caso. Eso, no significa, que no crea en el romanticismo, sobre todo en las mujeres, tienen en ese aspecto la piel más sensible, en esos temas igual que en casi todos, son las que tienen el mando. Y claro, en ellas el invento del amor le va a modo de anillo al dedo. Todo, lo debemos hacer por amor. Desde lo más insignificante, a lo más trascendental. Si a ella, le apetece ir a ponerse morena ese fin de semana, dicen: Amor, iremos a la playa este sábado ¿verdad? Y con esta introducción y ese final de pregunta retorica, te ves, tú, cargando en el coche; una bolsa que parece una maleta, una sombrilla, una tortilla de patatas, latas y otras bebidas, cremas de todo tipo, dos mudas, tres pares de zapatos, una par de toallas solo para ella, y algo más que siempre olvidamos, y luego si cabe, lo tuyo. Para hacer dos horas de cola en la autovía otra hora y media para encontrar parking, desplegar el campamento y tumbarte si es que ella quiere sombra, al sol, durante el rato que le apetezca. Luego, al cabo de un tiempo no concreto, te pide si quieres meterte al agua, y tú, iluso, dices que sí, animado por qué allí, medio escondido entre la masa, podrás arrimar un poco. Pero no es así, entra despacio y se sumerge igual que una sirena, para salir como un gato, dejándote con las ganas y una tristeza extraña. Incluso, con algún pensamiento de dejar campamento y señora allá. Pero es tu amor, ese que te han metido desde siempre tan adentro, que lo echas de menos incluso cuando tendrías que echarlo de más. También, a la inversa pasa. Lo que quiere decir, que no sé, como me aguanta mi mujer.
En fin, que el amor, es la excusa perfecta para domarnos, los unos a los otros, obviando cada vez más nuestro instinto animal. Dejemos las siete diferencias entre hacer el amor y el sexo, para otro día.
¡Hagan el amor o follen! Lo que más les apetezca. Dicen que es saludable.
8 comentarios:
Claro que es saludable. Absolutamente. Mas cama y menos paseos......
Abrazo!
Sí Dany, y sobre todo, si son de aquellos romanticones...
Un saludo.
Jajajajajaja, me vino a la cabeza un post tuyo de los guisantes y la playa...
Me encanta follar en plan romántico y hacer el amor como animales.
Besos Jou.
Sí Pequeña, pero eran espinacas. Qué más da.
A mí, incluso, me gusta ser romántico en plan animal y follar haciendo el amor. En fin, todas los combinaciones.
Un saludo.
Una cosa es hacer el amor enamorada y otra ser romántica.
Mi cuota de romanticismo es bastante baja, lamentablemente. Te digo más, soy de las que se duerme automáticamente después.
Al menos, no ronco.
O no me escucho, bah.
Malena, eres el deseo de cualquier hombre!!!
A mí, me ocurre lo mismo, aunque ronco.
Un saludo.
Creo que me voy a calificar dentro del género del que hablas... románticas hasta decir basta... lo cual no es bueno ni malo.. es un calificativo y nada mas...
Alegrias y penas te reporta a partes iguales.
En cuanto al amor y el folleteo... yo los distingo bastante bien... si existe sentimiento puedes hacer las dos cosas indistintamente con el susodicho..(a gusto del consumidor)
Si no hay sentimiento alguno... hacer el amor es un eufemismo para obviar follar... que para algunos no es politicamente correcto, pero cada cosa tiene un nombre...
En ambos casos... disfruten!! y que te quiten lo bailao.
Besos Jou.
Gala: Muy interesante reflexión. Sobre todo, cuando hablas de lo políticamente correcto, esos, son los mismos que más pecan.
Un saludo.
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