lunes, 10 de octubre de 2011

La pena.


Y te fuiste.
Como se van las nueves
y la lluvia.  
Olor acre. Sin advertencia,
de noche y única sentencia.

Se secó el suelo.
Al mediodía. 
Mientras crecía el duelo.
Sí, vida mía, me dejaste vida.
Pero únicamente para mal vivirla.

Añoro,
a la vez que no dejo de orar:
La pena afligida.
Pena, que pesa hondo.
Y a usar no aprendo;
En esta vida descolorida, nacida 
para vagabundear.    

7 comentarios:

Gala dijo...

Una pena muy profunda.
Un hundimiento del alma, que pesa demasiado para llevarlo colgado al cuello.
Dale un poquito de color... tal vez así no pese tanto.
Tal vez así, la pérdida sea mas llevadera, aunque siga siendo indeleble.

Besitos Jou... desde el medi.

Dany dijo...

Puede que dure hasta la próxima lluvia....puede que no. Agujeros del alma. Un abrazo!

Pequeña Rock and Roll dijo...

Qué bonito Jou!! realmente bonito.

M.

(dejar vida sólo para malvivirla, zas!)

esa de afuera de mí dijo...

siempre se van de noche
aun
cuando se van de dia.

besos

Jou McQueen dijo...

Gala: Sí, un yugo difícil de liberar.
Un saludo.

Dany: ¡Malditas sequías!
Agujeros complicados de coser.

Un saludo.

Pequeña: Me alegra que te gustara. Viniendo de una poetisa como tú.

Un saludo.

L: Sí, siempre, pero a menudo amanece.

Un saludo.

Cristina. dijo...

ay que pena por Dios.Que mal se me da a mi interpretar según qué cosas.

Jou McQueen dijo...

Cris: Pena con pena y pena desayuno, decía el poeta Miguel Hernández

Un saludo.