Al ser un miedoso, malgastaba demasiado tiempo convenciéndome; que dios existe y que mi mujer no me era infiel. Derrochaba minutos al largo del día rezando y piropeando a mi esposa. Supongo, que debía ser por el miedo al abandono, a quedarme solo. A dios le pedía que ella no se enamorara de otro y a ella, que por dios, no se fuera. Hasta que se fue y no supe a quien echar la culpa.
Intentando seguir engañando con dios, porqué mi mujer no me dio opción a seguir haciéndolo con ella, llegué a la conclusión que si realmente él, el ser supremo existe, se presente cuando quiera por casa que yo, volveré encantado al catolicismo. De mientras, soy un putero con devoción. A mi esposa, le recomendaría, que no lo hiciera... lo de pasar por casa. No vaya a ser, que al fin se conozcan y me dejen perplejo.
3 comentarios:
yo le pido a dios que a mi ex se lo lleve lejos, bien lejos... pero no me hace caso, por el temita de mi ateismo y esas cosas...
muax
Ois de mi vida, por no decir dios de mi vida... entre la anaconda y esto... jajajaja
Un país de destierro de ex, aunque... al final todos nos encontraríamos allí... (pensando)
Besos
Lila, mi fe me dice que sería mejor que se lo pidieras a tu ex directamente, si así no funciona, un matón le haría entrar en razón, seguro. Olvídate de dios para estos trabajos y para los otros también. Un saludo.
M, Allí no sé donde es... pero aquí en demasiadas ocasiones nos cruzamos con personas equivocadas, en otras no. Un saludo.
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