miércoles, 8 de septiembre de 2010

Dios y mi (ex)mujer.

Al ser un miedoso, malgastaba demasiado tiempo convenciéndome; que dios existe y que mi mujer no me era infiel. Derrochaba minutos al largo del día rezando y piropeando a mi esposa. Supongo, que debía ser por el miedo al abandono, a quedarme solo. A dios le pedía que ella no se enamorara de otro y a ella, que por dios, no se fuera. Hasta que se fue y no supe a quien echar la culpa.

Intentando seguir engañando con dios, porqué mi mujer no me dio opción a seguir haciéndolo con ella, llegué a la conclusión que si realmente él, el ser supremo existe, se presente cuando quiera por casa que yo, volveré encantado al catolicismo. De mientras, soy un putero con devoción. A mi esposa, le recomendaría, que no lo hiciera... lo de pasar por casa. No vaya a ser, que al fin se conozcan y me dejen perplejo.        

3 comentarios:

Lila Biscia dijo...

yo le pido a dios que a mi ex se lo lleve lejos, bien lejos... pero no me hace caso, por el temita de mi ateismo y esas cosas...
muax

eMe dijo...

Ois de mi vida, por no decir dios de mi vida... entre la anaconda y esto... jajajaja
Un país de destierro de ex, aunque... al final todos nos encontraríamos allí... (pensando)

Besos

Jou McQueen dijo...

Lila, mi fe me dice que sería mejor que se lo pidieras a tu ex directamente, si así no funciona, un matón le haría entrar en razón, seguro. Olvídate de dios para estos trabajos y para los otros también. Un saludo.

M, Allí no sé donde es... pero aquí en demasiadas ocasiones nos cruzamos con personas equivocadas, en otras no. Un saludo.