martes, 30 de marzo de 2010

El santo padre.

En el circo de la iglesia, les han crecido los enanos. Una expresión, nunca, había sido tan adecuada. Y el jefe; el papa, esta metido hasta el cuello. A los sensatos, se les ha descubierto su insensatez. Los niños miedosos de quemar en el infierno eterno, son mayores, más cultos que sus profesores y más valientes, y han sacado a la luz, la barbarie que vivieron. Los violaron, con amenazas, siendo chicos. Curas; asquerosos, sucios la mayoría, viejos, lascivos, viciosos e insanos. Seres, que tendrían que haber sido juzgados en juicios populares, no escondidos por sus dirigentes. Evadiéndolos de de la condena por esos pecados tan injustificables como depravados. Y entre los que sabían qué pasaba en demasiados lugares, estaba el Benedicto XVI, el santo padre de hoy. Y no se yo, que es menos, si santo o padre. Pues no se explica esté complot a favor de los abusadores, hay infinidad de hombres hoy, críos entonces, victimas de esos despotismos que van sacando a la luz sus verdades, por insufribles y traumáticas que sean. Personas que pierden la razón hay, ha habido y habrá siempre. Pero que esas personas sean protegidas, y sus hechos ocultados a todos y a todo ámbito judicial, eso es, lo que no podemos tolerar ni proponernos alcanzar a comprender. Tenemos que demostrar más moral, aunque no la vayamos pregonando. En España un obispo italiano nos envió un cura que esta siendo investigado en Italia por estas causas, esos si, traía carta de recomendación diciendo que era buena persona, ¿qué entienden ellos por buena persona? Igual, tendrían que hacer los que silencian el terrorismo, ya sea de ETA, Al Qaeda, o cualquier otro. Porqué así, callándolo, sólo creamos odio. Y el odio lo único que sabe hacer es; reproducirse.

4 comentarios:

Agustín Molina dijo...

Tengo una teoría:
Si hay tantos casos de corrupción de menores que salen a la luz, y uno está más cerca del Papa que otro (el hermano que otorgaba castigos corporales a los niños del coro, el obispo que violaba niños sordos encubiertos por el Papa, por dar algunos ejemplos), lo que está ocurriendo es que están "entregando" casos que alejen las sospechas del mismísimo Ratzinger.

Juan José Oviedo dijo...

Una cortina de humo... es bastante probable, es decir, muchos de los gobiernos actuales suelen utilizar "diversos acontecimientos" para distraer a la gente, con el apoyo de los medios. Es decir, en el Perú, cuando Fujimori, ex presidente, ahora preso, hacía de las suyas en Palacio, salió un coco aterrador a la televisión llamado Laura Bozzo, quien lo único que hacía era lo que en Roma: Pan y circo para el pueblo.
Todos comentaban lo que hacía y veían su programa en vez de atender lo que sucedía atrás de esto.

Jou McQueen dijo...

Agustín: Puede, que usted tenga razón. Que alejen al papa, acercándonos a otros. Pero si vamos sacando columnas para dejar sólo, la central, no sé yo si resistirá todo el peso de la iglesia. I es mucho el que le cae encima.

Jou McQueen dijo...

Juan José: Bastante grave lo de Fujimori, como para distraerse en un programa televisivo, por lo menos fuera fútbol; un Madrid – Barcelona de calidad. ¡¡¡Que distraídos nos tienen con lo que quieren!!! Es un humo demasiado negro, no blanco, como a veces se espera del vaticano. Que la mierda salpique a todos los que se lo merezcan, deseo. Muy interesante “ojos de perro azul”, como no podía ser de otra forma...